¿Cómo hacer un huerto cuando vives en un departamento?

¿Cómo hacer un huerto cuando vives en un departamento?

La actual crisis sanitaria nos ha obligado a mantener distancia social y pasar más tiempo en nuestras casas, lo que ha hecho replantearse a muchos nuevas actividades, que probablemente antes nunca probaron hacer desde sus hogares, y una de ellas es crear tu propio huerto casero. Lo que significa un desafío especial para aquellos que viven en departamentos, dado que tienen que buscar el lugar perfecto según el espacio y la luminosidad.
“Las hortalizas tienen un ciclo de producción corto, algunas se pueden recolectar a los 60 días de la siembra, lo cual se adecua a la agricultura urbana. Los huertos pueden ser hasta 15 veces más productivos que las fincas rurales, y además un espacio de apenas un metro cuadrado puede proporcionar 20 kg de comida al año”, indica un reporte de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO.
Por lo tanto, tener un huerto casero, además de ser un hobby y hacerte pasar un rato agradable, proporciona una buena cantidad de hortalizas y verduras ecológicas y sabrosas a nuestras recetas.
Para empezar con el huerto, lo primero que debes definir es en qué lugar del departamento irá. Se recomienda un lugar bien iluminado, ya que las plantas requieren un mínimo de 6 a 8 horas de luz solar para su crecimiento óptimo. Si solo puedes ubicarlos en sombra parcial, se recomienda optar por sembrar lechuga, albahaca, acelga, perejil, menta o rábanos, que son las semillas que toleran estos ambientes.
Sin embargo, debes prestar atención sobre qué tipo de hortalizas eliges, ya que no todas crecen en la misma temporada. La primavera es la estación en la cual podemos sembrar una mayor variedad de hortalizas, seguida del otoño y por último en el verano e invierno. Aunque también se puede encontrar ciertas hortalizas que se pueden sembrar en cualquier mes del año. Uno de los grandes beneficios de esto, es que uno se vuelve a conectar con las estaciones y las bondades que entrega cada una.
Luego de haber definido el espacio, debes pensar cuál será el recipiente para tu huerta. No existe uno ideal, sino que dependerá del área con la que cuentas, y la inversión que quieras realizar. Existen mesas de cultivos que requieren un espacio medio-grande, jardineras y/o macetas que son más flexibles, jardines verticales que usan un espacio pequeño, y las macetas colgantes que son las que menos espacio ocupan. En el caso de un departamento pequeño, se sugiere optar por los jardines verticales, ya que es una buena alternativa para ahorrar espacio, y además favorecen a la reducción del ruido externo.
Otro de los puntos a considerar, antes de comenzar a armar tu huerta casera, es la tierra. Ésta debe estar lo más suelta posible y contar con buen drenaje. Por eso, la maceta debe tener siempre un agujero en la base. Si la tienes en el interior puedes añadir una bandeja para cuidar el piso de la casa. Si utilizas algún envase, este debe tener orificios en la parte inferior para la salida del agua de riego. Para tener un sustrato de buena calidad, puedes utilizar el compost generado con los propios residuos orgánicos de tu casa, que le agregará a la tierra los nutrientes necesarios para que las semillas crezcan fuertes y sanas.
¡Esperamos que estos consejos les sean de utilidad, y se animen a cultivar sus propios alimentos!

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